Por @Joaquin_Pereira
Amanece el día de la cosecha del año 2023 para recolectar participantes en los Juegos del Hambre en Venezuela-Panem. El evento fue creado para recordarle a las nuevas generaciones que no se atrevan a reclamar su libertad como lo hicieron en el 2014 los estudiantes venezolanos.
La rebelión fue reprimida brutalmente por el régimen chavista; incluso el estado Táchira -el distrito más aguerrido- fue bombardeado, los pocos sobrevivientes se mudaron a unas cavernas subterráneas a las que llamaron Distrito 13.
En cada universidad del país se escogen dos tributos, un alumno y una alumna. Los escogidos deben ir a una arena artificial creada por técnicos cubanos donde tendrán que matarse entre ellos hasta que sólo quede uno.
Al ganador de los juegos se le otorgará el privilegio de tener una casa de las expropiadas a la burguesía apátrida en la urbanización la Lagunita de Caracas, destinada actualmente a los hijos de los jerarcas más altos del régimen chavista.
Antes de partir a la arena -que cada año varía de localidad, de la isla de la Orchila a la Gran Sabana o a las montañas de Mérida- los tributos deben desfilar ante Fidel Castro, aún con vida gracias a los más costosos avances tecnológicos costeados con los restos del petróleo venezolano que aún queda en la Faja Petrolífera del Orinoco.
Todos los habitantes de la Comuna Suprema visten de rojo en las gradas del antiguo Paseo de los Próceres y actual “Altar Mayor del Amor Supremo al Supercalifragilisticoespalidoso Líder Eterno y Galáctico Mega-estelar Digno de Toda Mayúscula Hugo Chávez”.
Allí se presentan cada par de tributos disfrazados con un distinto producto escasísimo y altamente demandado por la población, hasta el punto de matarse a dentelladas por obtenerlo: Los del Distrito 1 se visten de papel tualé, los del Distrito 2 de Harina PAN, los del Distrito 3 como potes de leche,…
Una vez en la arena los competidores tendrán que enfrentarse a una serie de trampas que se activan cada hora: gases lacrimógenos vencidos, disparos de metras, sapos rojos que avisan donde se esconden, ataques de mutos-fanáticos creados por medio de horas de tortura viendo sólo Venezolana de Televisión,…
¿Pero qué sucede? Esto no había pasado antes… Todos los venezolanos ven en cadena nacional como los tributos trabajan en equipo en la arena para formar una frase con rocas. Poco a poco se va conformando la frase “Fuck you Fidel”.
Uno de los estudiantes escogidos para el sacrificio grita a las cámaras: “No nos mataremos entre nosotros para saciar la sed de sangre de los Castro”. Todos recaban las armas de la cornucopia y empiezan una guarimba para repeler el ataque de los Funcionarios de la Paz que ya llegan para exterminarlos.
Un tributo comienza a chillar como un chiguire y el sonido se replica no sólo en la arena de los juegos sino en los distritos que observan el espectáculo por televisión. Las guarimbas renacen en todos los rincones de Venezuela: la chispa volvió a extenderse… Esperamos que esta vez la suerte esté a favor de la libertad.
